Nunca olvidaré mi primera experiencia en una colaboración musical con Monkeyrocks en vivo en Festicon Nogales.
Estaba muy nerviosa, pero di lo mejor de mí.
Era el día del concierto y yo estaba muy nerviosa. Había estado ensayando durante semanas, pero aún así estaba nerviosa por actuar en frente de una gran audiencia.
Cuando subimos al escenario, las personas se acercaron y empezaron a aplaudir. Me sentí abrumada por la emoción y por un momento pensé que me iba a desmayar.
Comenzaron los acordes y la energía de los Monkeyrocks comenzó a darme tranquilidad y acogida.
Fue entonces que empecé a cantar y me olvidé de todo lo demás.
Cantamos "Neverending Story" y "Barbie Girl Punk Rock Edition" y la audiencia se lo pasó en grande. Bailaban, cantaban y aplaudían. Fue una experiencia increíble y nunca la olvidaré.
Después del concierto, me acerqué a Monkeyrocks y les di las gracias por la oportunidad.
Esta experiencia me enseñó que puedo hacer cualquier cosa que me proponga. Si tengo miedo, debo enfrentarlo y seguir adelante. Estoy muy agradecida a Monkeyrocks por haberme dado esta oportunidad y estoy deseando seguir colaborando con ellos.
Esta experiencia también me enseñó que la música es una poderosa herramienta que puede unir a la gente. Cuando la gente canta y baila, se olvida de sus problemas y se conecta con los demás. La música es una fuerza del bien en el mundo y estoy muy feliz de poder formar parte de ella.
También agradezco a todos quienes en el camino me dieron una mano, en particular a Miguel y Giovy quiénes me apadrinaron en todo momento.